India inicia el desarrollo del AMCA, un avión de combate de 5ª generación.
Veinte días después del breve enfrentamiento armado entre India y Pakistán, la niebla aún no se ha disipado… Y sería muy inteligente por parte de cualquiera desde fuera sacar conclusiones definitivas, a menos que acepte al pie de la letra la información no verificada, o incluso falsa, que proviene de ambos lados.
Lo que es casi seguro, porque Nueva Delhi lo ha admitido, es que la Fuerza Aérea India perdió al menos tres aviones de combate durante esta secuencia, probablemente incluido un Rafale. ¿Bajo qué circunstancias?
Una vez más, no se puede decir nada en este momento. Sólo que Martin Baker, el fabricante del asiento eyectable del que está equipado el cazabombardero de diseño francés, guarda silencio sobre la eyección que podría haber ocurrido el 7 de mayo.
Otra certeza: apoyándose en las declaraciones de la fuerza aérea paquistaní, China está promocionando frenéticamente su avión de combate J-10 y el misil aire-aire de largo alcance PL-15. Su eficacia se juzgará con el tiempo… porque, por el momento, circulan muchos rumores sobre las intenciones de tal o cual país, sin que sepamos realmente si tienen alguna base de verdad.
En cualquier caso, el 27 de mayo, mientras la compra de 114 cazabombarderos en el marco del programa “Multi Role Fighter Aircraft” [MRFA] para la Fuerza Aérea de la India seguía en la agenda, el Ministerio de Defensa indio anunció que acababa de aprobar el “modelo de ejecución del proyecto AMCA [Advanced Medium Combat Aircraft], que tiene como objetivo desarrollar un avión de combate de quinta generación”.
Esta luz verde “marca una transición crucial entre la planificación conceptual y las fases de desarrollo activo”, subraya el sitio especializado Indian Defense News.
El periódico Economic Times afirmó que “demuestra el compromiso de Nueva Delhi de acelerar el desarrollo del prototipo AMCA y profundizar las capacidades aeroespaciales indígenas como parte de Aatmanirbharta”, la política destinada a aumentar la autonomía estratégica de la India.
Este proyecto se llevará a cabo bajo la supervisión de la Agencia de Desarrollo Aeronáutico [ADA], que depende de la Organización de Investigación y Desarrollo de Defensa [DRDO] del Ministerio de Defensa de la India.
Según el director de este último, Samir V. Kamat, el proyecto AMCA comenzó realmente en 2024, cuando el Comité de Seguridad del Gabinete [CSC] lo aprobó. “Tomará diez años y estamos comprometidos a entregar la plataforma para 2035”, aseguró.
Como recordatorio, en 2007, India se acercó a Rusia para llevar a cabo conjuntamente el programa FGFA [avión de combate de quinta generación], basado en el T-50 PAK FA [conocido posteriormente como Su-57 “Felon”]. Sin embargo, ante el aumento de los costes y la imposibilidad de obtener las transferencias de tecnología que deseaba, puso fin a esta cooperación en 2018. De ahí el proyecto AMCA.
No se ha especificado el papel del principal fabricante de la India, Hindustan Aeronautic Limited [HAL], en el desarrollo del AMCA. Sin embargo, el Ministerio de Defensa indio indicó que “entidades de los sectores privado y público” podrán participar, “ya sea de forma independiente, en una empresa conjunta o en un consorcio”. Agregó: “El postor debe ser una empresa india que cumpla con las leyes y regulaciones del país”.
En términos generales, el AMCA será un avión de combate “multifunción y furtivo”. Incorporará “tecnologías de vanguardia como fusión de sensores, bahías de armas internas y aviónica avanzada”.
Si bien se ha adquirido experiencia con el desarrollo del Tejas, aún queda por ver si la industria aeronáutica india dominará todos los conocimientos necesarios para llevar a cabo con éxito un programa de este tipo. Y especialmente cuando se trata de motorización. Es posible que se establezca una cooperación con Francia para este fin.
En cualquier caso, esta posibilidad aparece en la «Hoja de ruta hacia el centenario de las relaciones franco-indias», publicada en 2023 por el Elíseo. Según el documento, se trata del “desarrollo conjunto de un sistema de combate aéreo”.
Laurent Lagneau
El AMCA puede venir bien a Europa. Dassault parece colaborar con lo cual el FCAS tendría soluciones antes probadas en AMCA. O puede hacer que Dassault se sienta más fuerte en el FCAS y la cosa acabe mal
Paco. Primero que se pongan las pilas con el programa europeo. Así como van las cosas, los surcoreanos tendrán uno de 6.ª generación mucho antes que los franceses, españoles y alemanes. India no tiene la plata ni los ingenieros que aporten algo nuevo.
India es la campeona de la No alineación, de ahí parte de sus problemas en la indigenación de sus sistemas importantes. Si estuviera bien anclada formando parte de un bloque, si que estarían algo más adelantados.
Una vez China comience a ser más agresiva (todavía más) India se acercará sin duda a otras naciones u organizaciones, por lo que podrán adelantar en las áreas clave. Eso si, para el 2035 China tendrá en el aire al menos 1.000 5a. generación y 200 6a. Con los presupuestos militares hemos topado.
Pero si no han podido ni siquiera desarrollar completamente un caza de 4a generacion ( Tejas MK1 y 2) y su versión naval como van a desarrollar un 5a generación sin ayuda exterior
No soy muy ducho en estos temas pero permítame mi opinión a pesar de que quizás sea equivocada. Creo que existe actualmente una tendencia, corriente o moda, que ciertos países llenos de egos y aún más de pobreza (excepto Corea), se embarquen en tan tremenda empresa teniendo limitadas sus facultades a la hora de crear estas máquinas.
De hecho, hay modelos que no van a poder montar motores autóctonos porque su industria no es capaz de desarrollarlos aún. No obstante, me sorprende que en tan solo unos años pongan demostradores en vuelo y en algunos más, las primeras unidades cuando el verdadero referente máximo exponente de esta tecnología, EE.UU. tarda hasta décadas en desarrollarlos. Lo que me lleva a pensar dos cosas: en la credibilidad de ese furtivismo del que presumen; y que al final, los de siempre, con sus retrasos y problemas, pero los de siempre, USA y Europa son los que están a la vanguardia de una tecnología creíble. Dicho lo cual, sin ser yo muy fan de lo turco por motivos políticos -religiosos, el KAAN es el que mas gusta. Muchísimas gracias.
Sr. Valdivia: Los aviones de combate furtivos son uno de los sistemas de armas más complejos y sofisticados que existen. Pero para algunas naciones emergentes, con una base industrial poderosa y estructuras de desarrollo tecnológico (como Turquía, Corea del Sur e India), no es hipotético diseñar y construir aviones de este tipo. De hecho, con la información disponible y los programas de diseño avanzado actuales, es posible diseñar y construir células furtivas decentes y hasta efectivas. De hecho, la furtividad se basa en tres pilares: formas, materiales y recubrimientos RAM. En cuanto a las formas existe una cantidad finita de soluciones de la física aerodinámica, de las cuales la fórmula aplicada en el F-22 y replicada en cierta manera en el F-35 es muy adecuada, y es por ello que algunos diseños furtivos se asemejan. Hay que aclarar que las formas no solo son externas, sino internas, de allí el grado sumo de complejidad. La idea es desviar las ondas EM para evitar que regresen a su emisor, y también crear «celdas» para atraparlas. Son muy grandes las soluciones técnicas necesarias. Pero está muy estudiado y se dispone de cierta información veraz desde donde partir. Respecto a los materiales es lo mismo. Las células se construyen con un alto porcentaje no metálico, consistente en fibras de carbono, de vidrio y plásticos especiales, además de las aleaciones metálicas. Respecto a los recubrimientos RAM, este es el aspecto más complejo de la tríada. Existen diversas técnicas y materiales, en general dispuestos en forma de pinturas, aunque también en capas o combinadas. En general se utilizan partículas o placas de diversos materiales dieléctricos (como hierro o carbón) disueltos en matrices poliméricas. Estas partículas, adaptadas para reaccionar a una cierta cantidad (no a todas) de RF emitidas por los radares, cuando son alcanzadas por las ondas, crean un campo magnético, descomponiendo la onda en calor, que luego se disipa. Esta acción reduce significativamente la RCS del avión, retardando su detección (aunque no impidiéndole). La composición exacta de cada recubrimiento es material secreto industrial del más alto nivel, y los poseedores no desean compartirlo con terceros. Es por ello que cada nación que intenta construir un caza furtivo, debe desarrollar su propio proceso de I+D+i en este campo. Hay informes que indican que Francia está en proceso de colaboración con India en este tema, ya que ambos lo necesitan: Francia para el NGF dentro del programa SCAF e India para el AMCA. Una complicación extra es que la aplicación de estos recubrimientos RAM son muy complejos, pues deben ser aplicados con diferentes grosores según el grado de incidencia en el fuselaje y del tamaño de la RF en cuestión. Son productos sumamente tóxicos, y al menos la aplicación de las pinturas, deben realizarlos robots en instalaciones especiales. Respecto a los sistemas electrónicos (radares AESA, sensores IR/optrónicos -incluyendo IRST-, calculadoras de misión, sistemas IFF y EW, entre otros; así como pantallas “de vidrio” incluyendo HMD, son tecnologías que, en menor o mayor grado, pueden ser desarrolladas independientemente de los países más avanzados, así como una multitud de armas (aire-aire y aire-suelo); en algunas ocasiones en conjunto, como por ejemplo las de India con Israel o con Rusia. Los sistemas de escape (asientos eyectores) es un aspecto crítico, puesto que es un mercado dominado por muy pocos jugadores de cinco o seis países en el mundo. Pero es la motorización el punto más complejo y constituye el talón de Aquiles de la industria aeroespacial, siendo el mayor escollo para alcanzar la independencia productiva. Realmente, la falta de motores autóctonos condiciona la producción propia, así como la exportación a terceros, que queda sujeto a las condiciones establecidas por el proveedor, o las leyes del país, tales el caso de EEUU. Un buen ejemplo es Suecia, que a pesar de contar con productos de excelencia, no posee motores propios, por lo que debe depender de terceros. De los países emergentes mencionados, India y Turquía han comprendido perfectamente que el camino de la autosuficiencia no puede alcanzarse sin motores propios. Por ello, mediante asociación con terceros e inversiones en empresas nacionales, han establecido el camino para alcanzar esa meta. Es solo cuestión de tiempo, pero seguro que lo lograrán. Corea del Sur, seguro de su asociación con EEUU, ha preferido seguir dependiendo del gigante norteamericano. Es, si se quiere, un camino más corto y seguro para emprender la producción (sin emprender riesgos tecnológicos), y también mucho más económico. Sin embargo, a largo plazo, seguirá siendo dependiente de la voluntad política de EEUU. Eso es, justamente, lo que quieren evitar las otras naciones. Conclusión: no es descabellado para los nombrados desarrollar cazas de 5ta gen con relativo margen de éxito. Tampoco necesitan montañas de dinero, porque se trata en su mayor parte de tecnologías disponibles en su mayor parte. Sin embargo, siempre estarán un paso atrás respecto de los países verdaderamente creadores de tecnologías, como EEUU y Europa, que son quienes realizan las inversiones en I+D+i. Cuando sus tecnologías se estandarizan y terceros pueden aprovecharlas, éstos ya están desarrollando la siguiente. Rusia, lucha por seguir en ese grupo de punta; mientras que China lucha por alcanzarlo (está a un piquín de lograrlo).