Otro aliado ruso busca aviones de combate franceses.
Según informes, Uzbekistán ha manifestado un gran interés en adquirir cazas polivalentes Dassault Rafale, lo que abre la posibilidad de que Francia se asegure otro cliente para sus avanzados aviones.
Según el portal específico de la industria francesa Intelligence Online, citando fuentes gubernamentales francesas, el gobierno de Tashkent había expresado su deseo de adquirir aviones franceses durante la visita del presidente francés Emmanuel Macron al país el 2 de noviembre de 2023.
Durante la visita del presidente Macron, las conversaciones entre los dos países se ampliaron más allá de proyectos específicos en agricultura y uranio. El presidente francés anunció el desarrollo de una «asociación estratégica» entre Francia y Uzbekistán.
Aunque no se detallaron los pormenores exactos de esta asociación estratégica, en Uzbekistán, el término «estratégico» suele denotar el nivel más alto de asociación con otro país.
Según parece, las conversaciones mantenidas durante este intercambio diplomático incluyeron la posible adquisición de aviones de combate Rafale. Sin embargo, los términos específicos y los acuerdos de financiación para esta adquisición de aviones siguen sin revelarse.
Sin embargo, este interés de Uzbekistán representa un cambio diplomático significativo, teniendo en cuenta la alineación histórica del país con Rusia y su dependencia del apoyo militar ruso.
El interés de Uzbekistán por los cazas Rafale está en consonancia con su objetivo más amplio de modernizar sus capacidades militares, en particular su amplia flota de aviones de combate procedentes de Rusia.
Según los últimos datos, la Fuerza Aérea de Uzbekistán está armada con 38 cazas MiG-29, 20 cazas Su-27 y 20 aviones de apoyo en tierra Su-25, todos de origen ruso. En 2019, el país presentó una solicitud a la Federación Rusa para la modernización de su flota de cazas MiG-29.
En los últimos años, Uzbekistán ha diversificado sus activos militares adquiriendo aviones de fabricación europea, incluidos cuatro aviones de transporte ligero Airbus C-295W y una variedad de helicópteros de combate de Airbus Helicopters.
Curiosamente, Uzbekistán no es el único país de Asia Central que quiere abandonar los aviones de la era soviética. A finales de octubre de 2023, se informó que el vecino Kazajstán estaba intentando subastar más de 100 aviones de combate de la época de la Guerra Fría.
Este movimiento sugiere una tendencia regional más amplia entre los países de Asia Central para modernizar y actualizar sus equipos militares.
Optar por Rafales en lugar de cazas rusos
Uzbekistán ha confiado tradicionalmente en Moscú para la adquisición de aviones de combate, con planes anteriores que indicaban un interés en adquirir cazas polivalentes rusos Su-30 SM junto con municiones.
Sin embargo, los últimos informes apuntan a que Tashkent está considerando la posibilidad de adquirir aviones de combate franceses.
Este cambio no carece de precedentes, ya que en los últimos años numerosos países han renunciado a adquirir sistemas de armamento rusos. El principal motivo de estas decisiones es la preocupación por las posibles sanciones estadounidenses a las que podría enfrentarse el país comprador.
Entre los casos más destacados se encuentran los gobiernos de Egipto e Indonesia, que rechazaron la posible adquisición de los modernos cazas rusos Sukhoi Su-35.
En el caso de Indonesia, el país optó por cerrar un acuerdo con la francesa Dassault Rafale para la adquisición de 42 de estos avanzados cazas. Esta decisión refleja una creciente inclinación internacional a explorar alternativas más allá del equipamiento militar ruso.
El consejero delegado de Dassault Aviation, Eric Trappier, destacó en el Salón Aeronáutico de París celebrado en junio que la invasión de Ucrania por Moscú en febrero de 2022 ha influido en la dinámica competitiva de los cazas.
Trappier señaló que algunos países dudan ahora en comprar aviones rusos y también son reacios a optar por reactores estadounidenses. Sugirió que Francia, conocida por su tradicional neutralidad, podría surgir como una alternativa atractiva en este panorama cambiante.
Las sanciones impuestas a Rusia han añadido complejidad a la capacidad de Moscú para mantener sus aviones en servicio con clientes extranjeros. Mientras tanto, Dassault Aviation se ha asegurado numerosos pedidos en los últimos dos años, con uno de los grandes contratos procedente de los EAU.
El pedido de los EAU de 80 aviones Rafale sustituyó a las negociaciones mantenidas previamente con Washington para el F-35, lo que podría situar a los EAU como el mayor operador de aviones Rafale después de la Armée de l’Air francesa.
Además de los EAU, Egipto ha adquirido 24 Rafale y tiene un pedido de otros 30, mientras que Qatar opera actualmente 36, con opciones a otros 36 más.
Fuera de la región, el Rafale ha recibido pedidos de países como India, Grecia, Indonesia y Croacia. Además, Serbia y Colombia figuran entre los clientes potenciales que han manifestado su interés por el avanzado caza francés.
Ashish Dangwal
Ademas del tradicional desinteres de los gobiernos por apoyar al Eurofighter, creo que otro de los motivos que frenan la venta del avion son las imposiciones Alemanas sobre como y donde se puede utilizar el avion. Al parecer Alemania piensa que los aviones de combate estan hechos para sujetar la maceta. Que si hay vidas humanas en peligro, no se puede usar los aviones. Entonces para que valen?. Alemania es un mal socio en muchos aspectos.
No es casualidad que tengan tanto éxito las armas galas en todo el mundo, el Rafale en particular. No solo se debe a su indudable calidad, equipamiento avanzado y armas modernas; o a las facilidades financieras que ofrece el gobierno, junto a su estructura bancaria. Una parte primordial de su éxito se basa en que Francia, así como durante la guerra fría ofrecía armas a quien estuviera en condiciones de pagarlas, haciendo muchas veces caso omiso a cuestiones como gobiernos de facto o falta del cumplimiento del estado de derecho, transgresores del derecho internacional y un largo etcétera, era un proveedor poco escrupuloso, apartado de las cuestiones ideológicas que dominaban a ambas superpotencias.
(2): Hoy Francia es una alternativa válida a un mundo polarizado por EEUU y sus adversarios. Además, se ha visto beneficiado por la abrupta retirada del negocio internacional de armas de Rusia, perseguido por la ley CAATSA y potenciadas las sanciones de todo tipo por su condición de agresor, además de la manifiesta imposibilidad de sostener una logística adecuada a los miles de aeronaves militares ruso-soviéticas desperdigadas por todo el mundo en decenas de países. Además, Francia es prácticamente autosuficiente en aviones de combate. El Rafale es una plataforma de 4,5 gen, con muchas caracteristicas avanzadas de los cazas de 5ta gen, pero sin el onerosísimo sigilo y sus complejidades, que afectan entre otras cosas, la disponibilidad.
(3): El Rafales es, junto con el EF de las nuevas tranches el ejemplo más acabado de un moderno avion de combate multirrol, con excelente equilibrio entre capacidades, disponibilidad y posibilidades de pago, para países que no desean comprometerse con EEUU, ya que equiparse con sus aeronaves implica aceptar las condiciones de Washington. Muy probablemente el Rafale siga dominando el mercado de aviones de combate durante toda la década, debido, entre otras cosas, a la falta de competencia. A lo señalado de Rusia y EEUU, hay que sumar que las dificultades comerciales del grupo EF hacen que el Typhoon no sea competitivo. China, el tercero en discordia, no es aún un competidor que pueda quitarle mercado a Dassault.
De seguir así Dasault tendrá que pensar en ampliar o abrir una segunda linea de montaje de Rafale la actual ya no da más de sí y tiene un cuello de botella con los suministros de componentes para éste avión