Aumento repentino de barcos y submarinos rusos en el Mar Negro.
Las fuerzas ucranianas vigilarán un repentino movimiento de buques de guerra y submarinos rusos fuera de su base de Novorossiysk. La base naval, cerca del puente de Kerch, está más alejada de la costa controlada por Ucrania que la famosa base de Sebastopol, en Crimea, anexada por Rusia. Sin embargo, el inusual movimiento puede ser importante.
En la mañana de ayer miércoles fueron vistos buques y submarinos de la Armada rusa, abandonando en masa su base de Novorossiysk, en la zona rusa del Mar Negro. Esto es muy inusual y puede indicar operaciones a desarrollar.
Fuentes consultadas por Naval News confirmaron esta masiva salida. El grupo incluía el buque de desembarco de la clase Ivan Gren del Proyecto 11711, Pyotr Morgunov, el mayor buque anfibio del Mar Negro.
También contenía los tres submarinos de la clase Improved-Kilo del Proyecto 636.3 que estaban presentes en la base. Los análisis sugieren que también zarparon otros buques de guerra entre fragatas y corbetas, lo que dejó en el puerto sólo unos pocos buques de guerra y de apoyo de menor tonelaje. Es probable que Novorossiysk haya estado más vacío en muchos meses.
Recientemente, el Pyotr Morgunov ha tenido que transportar suministros de Rusia a Sebastopol tras el ataque ucraniano del 8 de octubre de 2022 al puente de Kerch. Aunque Rusia ha conseguido algunas reparaciones, el puente sigue teniendo una capacidad limitada. Así que los buques de desembarco de la Armada rusa han sido puestos en servicio como transportes. Sin embargo, la salida simultánea de los submarinos sugiere que puede tratarse de algo más que una misión de reabastecimiento.
Posible reacción a la amenaza ucraniana
Una explicación podría ser que la salida masiva sea un simulacro para comprobar la preparación de la tripulación. O posiblemente una precaución contra una amenaza inminente de misiles de largo alcance o drones marinos. Hasta ahora la base no ha estado al alcance de los drones aéreos o misiles de menor alcance ucranianos. Sin embargo, a pesar de su lejanía de la costa controlada por Ucrania, está al alcance de los drones marítimos ucranianos.
Se trata de pequeñas embarcaciones sin tripulación cargadas de explosivos. Son más conocidos por su dramático ataque a Sebastopol el 29 de octubre. Uno de los drones alcanzó Novorossiysk el 18 de noviembre. Causó daños limitados, pero envió el mensaje de que la base está al alcance de la mano.
Rusia ya había reforzado las defensas de sus bases navales y los buques de guerra y submarinos están ahora protegidos por múltiples barreras flotantes. Las barreras deberían proporcionar protección contra los ataques marítimos de drones. Así que esta explicación parece menos convincente.
Operaciones ofensivas
La explicación restante es que los activos de la Armada rusa están involucrados en una operación. La última vez que informamos de un aumento inusual de la actividad de la Armada rusa fue antes de que se produjeran extensos ataques con misiles contra Ucrania.
Los submarinos de la clase Improved-Kilo se han utilizado para lanzar ataques con misiles de crucero Kalibr contra Ucrania. Fueron retirados en gran medida de Sebastopol, en Crimea, en septiembre de 2022, tras los ataques ucranianos con drones contra la ciudad portuaria. Todavía regresan a Sebastopol para cargar misiles Kalibr. Pero tres de los cinco (cuatro mejorados-Kilo y uno original de la clase kilo) llevaban semanas en Novorossiysk sin poder abandonar el Mar Negro al no permitir Turquía su reentrada nuevamente en caso de quieran volver a este mar interior.
Esto no explica el éxodo masivo porque sería único que los tres participaran en un solo ataque. Además, la combinación de buques anfibios y submarinos también sugiere que no se trata de ataques con misiles.
La jugada más audaz: desembarcos anfibios
Una explicación que estará en la mente de los analistas es alguna forma de desembarco anfibio. El objetivo podría ser el suroeste de Ucrania para establecer un puente terrestre hacia Transnistria. Este Estado no reconocido y apoyado por Rusia forma parte de Moldavia y limita con Ucrania. Siempre se ha entendido que está dentro de los objetivos bélicos más amplios de Rusia unirse a ella.
Los submarinos participarían en misiones más amplias de inteligencia o de cobertura en torno a los buques anfibios.
Los desembarcos parecen poco realistas dado el destino de los avances rusos al principio de la guerra. Aunque amenazados con frecuencia, los desembarcos nunca llegaron. Al mismo tiempo, la infantería naval, similar a los marines, fue desplegada tierra adentro. Han quedado muy mermados y los planes para ampliar la fuerza de infantería naval tardarán meses o años en completarse. A pesar de todo, no podemos descartar algún tipo de operación anfibia.
Sin duda, los analistas y mandos de Ucrania seguirán de cerca esta evolución. En tiempos de paz, un éxodo de este tipo, sin una historia de fondo, apenas tendría interés periodístico. Pero en la guerra en curso adquiere una dimensión añadida.
H I Sutton
No creo que los rusos planeen un ataque anfibio, la probabilidad de perder buques y una ingente cantidad de hombres es muy alta, ya sabemos que Ucrania dispone de varios sistemas de misiles antibuque como los Harpoon, Neptune…Ya les hundieron el Moskva, no creo que se la jueguen de nuevo. En mi opinión, maniobras de entrenamiento y distracción y, a lo mejor, para alejar más a la Armada de un posible ataque ucraniano.
Pues que no dejen muchos buques en Sebastopol por si acaso, nunca se sabe.