El Parlamento rumano autoriza la compra de dos submarinos franceses Scorpene por 2.000 millones de euros
Hasta ahora, el grupo naval francés no había logrado vender su submarino Scorpene a una armada europea, ya que su competidor alemán ThyssenKrupp Marine Systems [TKMS] se le había adelantado en el proceso de adquisición en los últimos años. Y este patrón podría haberse repetido una vez más en Rumanía, que en 2018 anunció que estaba considerando la recuperación de una capacidad submarina para hacer frente a los problemas de seguridad en la región del Mar Negro.
Sin embargo, el proyecto rumano no pudo ir más allá de la declaración de intenciones, en parte por complicaciones presupuestarias. Pero se reactivó en 2022, con la perspectiva de un aumento significativo del gasto militar hasta el 2,5% del PIB a partir de 2023. «El Mar Negro está muy poblado: está lleno de ‘tiburones'», justificó Vasile Dîncu, entonces ministro de Defensa.
Entonces, tras reunirse con su homólogo francés, Sébastien Lecornu, en junio de ese año, Dîncu anunció que se había firmado una carta de intenciones para la compra de al menos un submarino Scorpene y helicópteros. «Hemos iniciado los trámites para presentarla al Parlamento», declaró a la prensa rumana.
Desde entonces, Dîncu se ha visto obligado a dimitir. Pero su sucesor, Angel Tîlvăr, sigue la misma línea. En abril, presentó una solicitud al Parlamento rumano para que autorizara la compra de «buques de tipo submarino» que permitieran a la Forțele Navale Române [Fuerza Naval Rumana] «llevar a cabo misiones de reconocimiento y recopilación de información, así como ‘acciones de combate’ contra buques de superficie y submarinos enemigos», ya sea en «aguas territoriales, aguas internacionales, zonas costeras hostiles o incluso en zonas de alto riesgo alejadas de nuestras propias bases navales».
El 18 de mayo, el Parlamento rumano dio luz verde a la puesta en marcha del programa «submarinos contra las amenazas de superficie y submarinas». Y se habla de equipar a la fuerza naval rumana no con uno, sino con dos submarinos del tipo Scorpene en un plazo de ocho años. El coste de esta adquisición se estima en 2.000 millones de euros. Esta suma incluye también el suministro de torpedos y contramedidas, así como el apoyo logístico inicial y la formación del personal que los operará.
Como recordatorio, Naval Group ofrece tres versiones de su submarino: Scorpène Compact, dedicado a operaciones litorales, Scorpène Basic y Scorpène 2000. Es «sigiloso, fácil de utilizar y autónomo gracias a su sistema de propulsión independiente del aire [AIP] de tercera generación, que le confiere 18 días de autonomía en el mar», subraya el fabricante.
Con una eslora de 60 a 82 metros y un desplazamiento de hasta 2.000 toneladas en inmersión, el Scorpene está equipado con el sistema de combate Subtics, seis tubos lanzatorpedos de 533 mm con 18 torpedos e incluso misiles antibuque SM39 Exocet.
En cualquier caso, el Grupo Naval tendrá ahora que transformar la prueba… para no repetir el escenario de las cuatro corbetas Gowind que Bucarest eligió en 2019, tras una licitación muy competitiva. Sin embargo, el contrato, por valor de 1.200 millones de euros, aún no se ha cerrado.
Laurent Lagneau
Uff, aún con los extras de siempre, 1.000 millones
por buque, una barbaridad lo que se ha encareci-
do el arma submarina. Casi se doblan adjudicacio-
nes de hace tan solo unos pocos años.
Es doble buena noticia para el S-80 Plus, ya que al
aplicar sobrecostes del programa, debería andarse
el submarino español por esa gama alta de presu-
puestos. Además, con el rearme mundial creo que
se espera mayor demanda de submarinos.
A ver si ya Navantia pone a punto el S80, y entra ya en servicio. Y a ver si Navantia ofrece una versión del S80 sin el AIP, pero con las baterías de litio Li+ para la exportación mientras se afina el sistema AIP.
Vale lo mismo que un dolfin 2 , con todo , hablo de la versión de exportación, no de la israeli
Buen negocio han hecho los franceses. Aquí la acción del gobierno supongo que ha sido decisiva. A ver si espabilamos en España, que cuando se logra un contrato luego la gente se rasga las vestiduras. Pasó con Venezuela, volvió a pasar con Arabia Saudita. A excepción de Alemania nadie en Europa pone pegas a un país políticamente amigo o aliado.
Y mientras el S80 retrasando la entrega. Hoy no mañaaaaana….
Después de los problemas imagino que quieren tener un producto fiable, imagina que después de estar disponible aparecen más. El palo a la firma iba a ser importante.
El S80+ está previsto sea entregado a la armada éste otoño ya falta menos
He dicho en varias ocasiones que hasta que el submarino español no se haya entregado a la Marina, esté plenamente operativo y con pruebas fidedignas de su calidad, España no venderá ni uno a nadie. Vamos muy lentos. Vamos muy retrasados. Y así no se va a ningún sitio. Además el tan cacareado AIP, ni está ni se le espera. Por lo menos «de momento»