La Marina alemana quiere que los UAV MALE acompañen a sus P-8A Poseidón «lo antes posible».
Previsto por Francia y Alemania a partir de 2018, el proyecto MAWS [Maritime Airborne Warfare System] debía desarrollar una capacidad de patrulla marítima europea “autónoma y de alto rendimiento”, basada en una aeronave específica de nueva generación, combinada con una gama de sensores [drones, semáforos, satélites, etc.]. Se iba a trabajar en radares, guerra electrónica, boyas acústicas y armas antisuperficie y antisubmarinas.
Sin embargo, después de que Berlín decidiera acelerar la renovación de su avión de patrulla marítima P-3C Orion encargando ocho P-8A Poseidon a Boeing, el proyecto se quedó en el camino… Y ahora cada uno va por su lado, ya que la Direction Générale de l’Armement [DGA] ha adjudicado estudios a Dassault Aviation y Airbus para preparar el sucesor del Atlantique 2.
En mayo, tres empresas alemanas – ESG, Hensoldt Sensors GmbH y Diehl Defence GmbH & Co – anunciaron que se habían unido en el consorcio MAWS GbR para realizar estudios de viabilidad sobre una solución en la nube basada en inteligencia artificial para analizar los datos recogidos por diversos sensores.
El anuncio se produce después de que Deutsche Marine presentara hace un año su plan “Marine 2035+”, que preveía combinar sus futuros aviones P-8A Poseidon con seis sistemas aéreos no tripulados dedicados a la guerra antisubmarina [ASW] de aquí a 2035. Ahora pretende dotarse de esa capacidad “lo antes posible”.
En enero, el jefe de la Marina alemana, almirante Jan Christian Kaack, declaró que ya este año se llevarían a cabo ensayos combinando el avión no tripulado MQ-9 “Sea Guardian” de la estadounidense General Atomics con el P-8A Poseidon. Finalmente, no tendrán lugar. Así lo afirmó el Ministerio de Defensa alemán en una respuesta escrita a una pregunta parlamentaria, sin dar las razones de esta decisión.
Sin embargo, sí se mostró partidario de “planificar con vistas a iniciar lo antes posible la adquisición de un sistema adecuado y disponible en el mercado”. Esto excluye, de facto, el EuroDrone [o RPAS MALE] dado que este aparato está aún en fase de desarrollo y que el primer avión no se entregará antes de 2030.
En cuanto a si se ha descartado definitivamente la idea de encargar aviones MQ-9 “Sea Guardian”, el Ministerio se negó a hacer comentarios. Cuando el sitio web especializado Hartpunkt se puso en contacto con él, su portavoz se limitó a decir que “actualmente se están estudiando varios sistemas”.
En este ámbito, la elección es bastante limitada: se limita al MQ-9 “Sea Guardian” y al Heron TP israelí, del que se está apropiando actualmente la Luftwaffe [fuerza aérea alemana]. Otra posibilidad sería el UAV Hermes 900 Starliner, que recientemente fue objeto de un acuerdo entre Elbit Systems y Lufthansa Technik con vistas a hacer una oferta a la Deutsche Marine.
Laurent Lagneau